El manejo integrado de plagas como nuevo enfoque de protección contra plagas agrícolas ofrece las mejores perspectivas para una supresión eficiente y económica de los insectos y otros organismos plagas, contribuye al mismo tiempo a una mayor protección del medio ambiente, del hombre y de la vida silvestre.

Los insectos representan una de las principales limitantes del potencial de rendimiento y longevidad del cultivo de la alfalfa. Se determinaron un gran número de especies de insectos, pero solo un grupo reducido de las mismas se considera económicamente importantes para el área semiárida pampeana central, a saber: pulgón de la alfalfa, Achyrthosiphon pisum; pulgón azul, Achyrthosiphon kondoi; pulgón manchado, Terioaphis trifolii; isoca de la alfalfa, Colias lesbia; y un complejo de especies de gorgojos.

El pulgón de la alfalfa, el pulgón azul, y el pulgón manchado son las especies predominantes en el área semiárida pampeana central y el número de individuos es mayor en variedades de alfalfas susceptibles si la comparamos con variedades resistentes a los mismos. Sin embargo sus picos de población se corresponden en ambos tipos de alfalfas.

Los pulgones manchado y verde aparecen en el otoño y fines de primavera en el área. Causan severos daños en el otoño en la implantación del cultivo, en los cuales produce la muerte de las plantas o el retaso en el desarrollo de las mismas con el consiguiente peligro de ser afectadas por las heladas tempranas. El pulgón azul alcanza su máxima densidad población a principio de primavera afectando la producción de forraje de la alfalfa. Por lo tanto para desarrollar estrategias de manejo integrado de los pulgones en alfalfa se debe tener en cuenta la dinámica poblacional de los mismos y su relación con el estado fenológico del cultivo.

a) Uso de variedades de alfalfa con resistencia a los pulgones.

Generalmente en variedades de alfalfa con resistencia a los pulgones, dependiendo del grado de resistencia de las variedades, el número de los mismos no llega al Umbral de daño por lo cual no se realizan tratamientos químicos. Por tal motivo, el uso de alfalfas con resistencia a esta plaga sería una estrategia efectiva para disminuir el efecto negativo de los pulgones y reducir la aplicación de insecticidas que afectan el equilibrio biológico y el medio ambiente.

b) Uso del Umbral de daño para determinar el momento de aplicación de insecticidas en alfalfas susceptibles a dicha plaga.

 

 

1. Umbral de daño en la implantación del cultivo:
Niveles de la población del pulgón verde y pulgón manchado superiores a 7 pulgones por planta y con un desarrollo de la alfalfa entre plántula y hoja individual determinan una pérdida significativa de plantas. Las sobrevivientes quedan seriamente afectadas en su desarrollo inicial y con un efecto posterior en la reducción del rendimiento de forraje. Si el número promedio de pulgones alcanza o supera los 5 a 7 pulgones por plántula hay que tomar una medida de acción, que puede ser la aplicación de insecticidas.
2. Umbral de daño en alfalfas implantadas:
Cuando el pulgón azul llega a una densidad en su población de 50 a 60 pulgones por tallo en plantas con un desarrollo mayor a 30 cm de altura, puede esperarse una pérdida de forraje. Por lo tanto hay que tomar una medida de acción, que puede ser la aplicación de insecticidas o el pastoreo anticipado del cultivo.
El uso de los umbrales de daño es una estrategia efectiva para disminuir la incidencia de los pulgones en alfalfas susceptibles a los mismos reduciendo a un mínimo las aplicaciones de insecticidas.

 

 

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